¿Cómo podemos interpretar la cruz de Jesús hoy?

Reflexiones

Escrito por: Dorothea Ortmann

Categoría: Reflexiones

Fecha: abril 05, 2023

Por lo general se celebra el Cristo resucitado, razón por la cual muchos cristianos evangélicos afirman que en la cruz no se debe representar el cuerpo sufriente de Jesús, porque ya no está allí, sino ya resucitó. Sin embargo, recordamos durante la Semana Santa la pasión y la muerte de Jesús en la cruz. De ahí surge la pregunta qué significado podemos dar a este hecho, cuyo final ya conocemos, porque, definitivamente, Jesús resucitó. Pero al mismo tiempo afirmamos que la cruz tiene carácter liberador y la tarea sería ahora descubrir cómo podemos entenderlo y darle un significado que nos toque profundamente.

En la Edad Media se solía poner a los enfermos graves ante los altares con representaciones de la escena de la crucifixión muy realistas para que ellos vieran que Jesús sufrió igual como ellos. Se creía que de esta manera se les proporcionaba ayuda a soportarlo, o en otro caso, ellos podrían pedirle que les ayude a curarse. De esta forma la cruz fue identificado con el sufrimiento del pueblo, pero muchas veces en el sentido de justificar el sufrimiento de los pobres.

Queda la pregunta pendiente ¿cómo podemos rescatar el verdadero sentido liberador de la cruz hoy? Parece que es mejor olvidarse de ella, porque no encaja con nuestra idea que tenemos comúnmente de Jesucristo, y mucho menos de nuestra propia vida que está impulsada por apuntar al éxito y bienestar mas no al sufrimiento.

¿De qué manera la cruz puede mantener su carácter salvífico y liberador? ¿Cómo hablar y pensar sobre la cruz, vinculándola a la resurrección? Si estudiamos la vida de Jesús, nos enteramos cuáles han sido los motivos que le condujeron a la cruz. Es eso lo que debemos recuperar: conocer a profundidad la vida de él, porque no es solo la cruz que tiene carácter salvífico, sino es su vida entera. Nosotros que nos consideramos seguidores de él, estamos llamados a seguir por amor las huellas del crucificado. ¿Y qué significa eso para la actualidad? Sentirnos solidarios con los pobres y hacer todo lo posible que su situación cambie. No es cuestión de repartir limosnas, sino buscar formas y estructuras sociales que hagan posible que cada uno de nosotros tenga un sueldo digno que cubra las necesidades básicas, de tener casa digna, acceso a la educación de calidad, salud, ropa y alimentación que nos mantenga sanos. Significa identificarnos con los movimientos sociales que luchan por una vida digna para que la sociedad sea más justa.

Perú es uno de los países con la mayor brecha social. Hay una elite muy acomodada, sabemos que es un porcentaje pequeño, luego existe una capa media que vive bien, pero la mayor parte de la población vive a las justas y debajo de ellos existen todavía personas que no tienen acceso a luz eléctrica, agua potable en su casa, no tiene letrina, no hay una posta medica cerca y su alimentación es monótona y deficiente. Estos son los pobres de hoy que sufren cotidianamente. Esta situación debe cambiar y hace falta voluntad política en el país.

Observamos que últimamente todos los intentos de cambiar el tablero político han fracasado o fueron boicoteados, pero eso no nos debe quitar el aliento de aspirar a un futuro justo posible. El llamado a constituirnos en discípulo de Jesucristo queda en pie, eso nunca va a cambiar. Es nuestra tarea mantener vivo el testimonio del Dios de la vida que no quiere que su pueblo sufra, lo que nos da un impulso más para luchar a favor de una vida digna para todos y unirnos con aquellos grupos que buscan lo mismo. Así que, hagámonos solidarios con aquellos que viven bajo la cruz y que padecen el sufrimiento de este mundo.

¿Por qué un cristiano debe meterse en eso? Porque somos las manos y los pies de Cristo y como él sufrió por nosotros en la cruz -interpretándolo modernamente como signo de solidaridad con los que sufren en este mundo- nos solidarizamos en representación de él con los pobres y sufridos de este mundo. La cruz de Cristo nos proporciona fuerza y confianza de ser capaces de hacerlo. Su sufrimiento en la cruz para con nosotros es un signo de cuánto una persona es capaz de entrega para los demás y de allí podemos derivar que es lo que podemos hacer para seguir lo que él nos dejó.

La cruz de Jesús

0 comentarios

También te podría interesar…

Certificado Internacional Junio 2024

Certificado Internacional Junio 2024

Certificado Internacional "Biblia y Realidad Latinoamericana" AETE (Perú), DEI (Costa Rica) y CMMLK (Cuba) La Facultad de Teología y Religión (AETE) con el auspicio del Departamento Ecuménico de Investigaciones (DEI) de Costa Rica y el Centro Memorial Martin Luther...

Videos 25 aniversario de AETE

Videos 25 aniversario de AETE

Videos con fotografías del 25 aniversario de AETE DESAYUNO DE REENCUENTRO POR LOS 25 AÑOS (2023) –1 Compartimos algunas fotos de nuestro tradicional DESAYUNO DE REENCUENTRO por los 25 ANIVERSARIO. El evento se desarrolló en Lima, en las instalaciones de la Casa...